martes, 5 de febrero de 2019

Miles de extraterrestres viven en nuestro planeta.


ESTÁN ENTRE NOSOTROS



Miles de extraterrestres (y otros) se mueven en nuestro planeta, ellos viven parte de su tiempo entre nosotros, en nuestra sociedad y no se los puede diferenciar a simple vista, pero aunque parecen pasivos, no lo son, simplemente ocupan lugares de poder operando y esperando el momento que se cumplan las condiciones idóneas para ellos y así mostrarse a los incautos terrestres de “tal manera” que sean asimilados como si fuesen “otros humanos”.
Los reptilianos, los híbridos, los grises, los “nórdicos”, los clonados,  los invisibles y todos los demás que interactúan con la humanidad y hacen gigantescas empresas internacionales, religiones y manejan las comunicaciones, los medios, la salud y los laboratorios del mundo, la industria armamentística, las políticas sociales de los países, los bancos y todo lo monetario en detrimento del bien real de los humanos reales, inducen cambios en la sociedad y la pretenden arrastrar a la ignorancia. Un ejemplo de esto último es la cantidad de nuevos cuestionamientos sin fundamento que surgen periódicamente, “la tierra plana”, “el domo de las aguas superiores”, etc. Arrastrando a la confusión a las mentes cándidas e ignorantes; y a la barbarie, a través de conflictos de género, desinformación y des humanización, destruyendo la célula inicial de esta sociedad terrestre, que es la familia, con fines de dominio…; y siguen trabajando, mermando el numero de la especie humana, su plan nunca se detiene.

Ellos influyen y crean organizaciones de humanos que les son fieles y están a su servicio, con lo que es fácil obtener terceras personas dependientes que ignoran la verdad y son capaces de cualquier cosa voluntariamente a cambio de determinados beneficios o simplemente subsistir.
Es decir, tienen los medios, tienen la forma, los recursos y la intención. Tienen el poder de engañar, de convencer y seducir a través de los intereses personales y hacer creer sus mentiras, con lo que influyen y manipulan naciones enteras, - políticos de por medio;  inescrupulosos “socios ocasionales” del poder de turno -, conformando la absurda y criminal base de esta pirámide inmoral y absolutamente poderosa que no deja “pensar” con libertad a la humanidad a fin de que no pueda despertar de este “sueño” que la aísla de hechos que están visibles a sus ojos.

Están cambiando la atmósfera terrestre e Instrumentando males endémicos que aíslan al ser humano en sí mismo, perjudicando el normal desempeño del cerebro y por consiguiente cambios de conducta, la creciente pérdida de memoria de corto plazo, la pérdida de la capacidad de discernir con claridad los hechos, depresión, autismo, trastornos de ansiedad, Mal de Parkinson, sueño anormal, cansancio permanente, confusión, desgano, desinterés, estrés, hipertensión arterial, hipersensibilidad, tendencia a actos violentos, etc.
Hay una larga fila de consecuencias relacionadas a estos males. ¿Pero cómo llegaron al cuerpo y mente del ciudadano común? Es de público conocimiento que millones de “Empresas” arrojan al aire productos desconocidos e ignorados y que cuando hubo quejas, toda la documentación fue “archivada bajo 20 llaves” y nunca vio la luz.
Así, por el agua de consumo diario, las nubes y napas contaminadas, los alimentos transgénicos (alterados genéticamente) fumigados con Glifosato (herbicida), efluvios compuestos de nano partículas de aluminio, bario, Startium, Salt, Glifosato,  y elementos radiactivos) arrojados a gran altura, en todo el mundo, día y noche por vehículos aéreos; se divisan en el cielo como estelas de humo blanco y son llevadas por los vientos, nos rocían permanentemente, así como a las plantaciones, así al ser humano; que los asimila por la piel, su aspiración y mucosas. 

Del mismo modo que la langosta de mar es hervida con lentitud hasta el punto justo de su cocción, el ser humano no se dará cuenta hasta que sea muy tarde. Y lo más triste de todo esto es que no  es el hombre el ideólogo de tal aberración, pero si en un 80 % es quien la puso en práctica. Esto es lo que impide la intervención de quienes ven el flagelo pero no pueden intervenir, porque los líderes humanos de los hombres, están de acuerdo con todo ello y lo confirman a través de pactos perversos firmados en muy altas esferas y en privado.
Los medios influyen en la psiquis de todos, niños y adultos, e implantan deseos, pensamientos e ideas ajenas; naturalizando infinidad de nuevas conductas y bombardeándonos con mensajes subliminales de distinta índole, cuyo contenido termina siendo asimilado e incorporado a nuestro ser como propio y natural.
Si ellos alteran nuestra atmósfera, no les importa subyugar a la humanidad y suman además determinadas frecuencias electromagnéticas que llegan a través de los celulares con el objeto de paralizar nuestras enzimas de desintoxicación y así dañarnos al punto de reducir fuertemente nuestra especie en dos o tres generaciones, tal como lo informó públicamente el Dr. Klinghardt (Alemania). Me pregunto ahora: ¿Para quién la están cambiando…?
Es probable que quien exponga toda esta inmunda confabulación corre el riesgo de ser silenciado o ridiculizado a cualquier costo.
Costo que no dudarán en pagar los interesados en que se selle todo en el olvido, hasta el fin de las pactos. Mejor dicho el fin de la humanidad tal como la conocemos, o sea el fin de los tiempos.
Escribo esto para que los que aún pueden pensar conozcan la realidad oculta a sus ojos y comiencen a investigar, unirse, prepararse y difundir esta realidad.




Nota:  Este material es parte del capitulo 4 del libro "Yo Abducido" de Oscar Fernández (1926-1981)